En la localidad de La Madrid, situada a unos 450 km de la capital de la República Argentina, se instauró el debate sobre el uso medicinal del cannabis. Desde el pequeño poblado, el Dr. Marcelo Morante (1), profesor de la Universidad de La Plata, junto con el Intendente Martin Randazzo y otros miembros de la comunidad, lograron romper el hielo y hacer el ruido que hacía falta, para que en el país resonara la noticia y se iniciara la educación cannábica de la sociedad.
Argentina desde hace años viene luchando por los derechos humanos. La dictadura dejó un velo de miedo que encegueció y adoctrinó a la mayoría de la sociedad bajo el dominio de la información, el control mediático y la censura, sin ahondar en las cuestiones de lesa humanidad. Con todo este manejo de “La Verdad”, -la educación y el saber-, la planta de cannabis fue transmutando en el inconsciente colectivo, de ser una planta medicinal e industrial de uso cotidiano a ser un demonio destructor de la sociedad.



En la actualidad, con muchos golpes y dolor, se intenta despegar ese manto de ignorancia programada, para poder seguir con una calidad de vida más acorde a lo natural. Dentro de estas luchas está la del reconocimiento y descriminalización de los usuarios de cannabis.
Debido a la idiosincrasia conservadora del pueblo, conjuntamente con una Ley como la 23.737 que criminaliza y persigue a todo aquel que cultive posea o transporte Cannabis y un Estado ausente, es lo que llevaron a que Argentina aún esté en la edad de piedra de la carrera cannábica, en materia legal. No obstante, el resurgir de esta planta está ligado si o si a una concientización de los ciudadanos y la educación del sistema de salud público conjuntamente con los sectores de la producción y la industria.



Dentro de las iniciativas que surgieron en el país, la localidad de La Madrid, viene realizando activamente la vinculación entre el pueblo y el gobierno donde el Intendente del mismo, Martin Randazzo conjuntamente con el médico Marcelo Morante, están haciendo campañas de concientización y educación desde su pueblo para el país. Asimismo solicitando un permiso que autorice a llevar a cabo el cultivo de cannabis y la producción de aceite para poder realizar los estudios clínicos que recaben datos necesarios para el aval de un cambio en la ley argentina, que tanto hace falta.
Argentina es grande en extensión y posee una población aproximada de 40 millones, y partiendo desde este dato, solo se puede estimar cuantos de los habitantes del país han usado o utilizan actualmente el cannabis como terapéutico o recreacional. El hecho de que la planta sea ilegal y la tenencia para consumo este criminalizada, convierte a toda posible estadística en un dato más del sistema judicial y no figura en los registros de salud pública, con los cuales además de la estadística en si generada, se lograría poder tener información fehaciente sobre el uso y el impacto en la sociedad.
A pesar de que no se contemple un número exacto de los usuarios, y que se puede estimar un numero de posibles pacientes de tratamientos canàbicos, en diversos puntos del territorio se busca repetir el modelo de producción del aceite con fines medicinales. En las diversas agrupaciones, que desde hace años vienen militando y luchando por el auto cultivo, se gestan reuniones informativas y talleres donde capacitan a las personas a poder preparar sus propios extractos, sin necesidad de recurrir a importaciones costosas, que de por cierto ya son posibles en el país.
Otra modalidad que se presenta en el Distrito Federal, y buscan la legalidad y el reconocimiento inherente son los clubes de cultivo, que fueron los cimientos de la solidaridad entre los cultivadores y primeros usuarios medicinales de la planta. Si bien se ha extendido por todo el territorio nacional, los clubes “de hecho”, ya que no pueden inscribirse como tales, desde la comunidad cannábica se pretende la expansión y aprovechamiento de la planta en su totalidad.
Si bien el uso medicinal es uno de los más noble que posee la planta, es deber el informar de todo el potencial de la misma, ya que, debido a la forma de vivir, producir y contaminar, hoy estamos paleando las enfermedades de ese estilo de vida con Marihuana, pero… si pudiésemos evitar esa contaminación, para así evitar las enfermedades o por lo menos disminuir su incidencia en la sociedad. Lindos pensamientos utópicos dirían muchos, pero con cannabis es algo real, que está pasando en el mundo y como parte de ello puede pasar aquí.
No es utópico pensar el basar las economías productivas y la industria en un recurso renovable, que no contamina y que, es más, limpia y absorbe contaminantes de los suelos y el agua. Aproximadamente el 18 % del peso de un auto de alta gama es fibra de cáñamo, se construyen casas ecológicas y confortables, se realizan compuestos bio-platicos y combustibles como biodiesel o etanol. Básicamente todo lo que se hace con petróleo puede ser hecho con la planta de cannabis.
Estamos parado ante la revolución verde, la verdadera. El potencial productivo del cáñamo es infinito, y con esta industria sin límites, viene de la mano un planeta sano, con sistemas de producción basados en economías de carbono en el que el balance sea positivo para el ambiente y la sociedad. Generando empleos y nuevas oportunidades para toda la sociedad que no solamente necesita salud en cuanto a enfermedades, sino funcional y emocionalmente, los argentinos necesitan un cambio de aire, una calada y volver a encarar este tema de la prohibición con otros ojos, más compasivos y basados en datos científicos no en supuestos experimentos mal realizados que ya son historia ante la nueva evidencia y no tan nueva, que la comunidad científica ha brindado y sigue brindando día a día. Es hora de que argentina inicie la participación en este juego como lo está haciendo, abriendo la importación de aceite y como próximo paso, permitir el cultivo y producción de aceite nacional.
Será cuestión de tiempo, de trabajo y educación, hoy está en la mano de profesionales, cultivadores y expertos el llevar a cabo esta importante tarea de concientizar, para que, desde el pueblo informado, sigan surgiendo las revoluciones, los cambios que la sociedad quiere y necesita y solamente ella puede generarse solo si está abierta a mejorar.
En InfoCannabis hemos querido ahondar más sobre esta y otras iniciativas que se están planteando en Argentina y reunimos a Martin Randazzo, Intendente de la Municipalidad de La Madrid y al Doctor Marcelo Morante en un mismo chat para hacerles a ambos las mismas preguntas:
InfoCannabis – Por qué se han decidido a dar este paso? (solicitar un permiso que autorice a llevar a cabo el cultivo de cannabis)
Marcelo Morante: El paso dado por gral La Madrid surgió como respuesta natural a una gran duda que algunos siembran de si la comunidad está preparada para dar el debate del Cannabis Medicinal.
InfoCannabis – Como ven el panorama actual del cannabis en Argentina?
InfoCannabis – Que supondría para La Madrid una regulación del cannabis en Argentina?
Marcelo Morante: Para La Madrid es un gran desafío comunitario donde se visualizan los valores solidarios pero que también recuperan en productividad y fuentes laborales, y seguro deberán trabajar todas las instituciones en educación
InfoCannabis – Han recibido críticas de los sectores más conservadores?
Marcelo Morante: Los sectores más conservadores critican el proyecto y ven un futuro muy oscuro, un pueblo lleno de narcotraficantes y una juventud muy enferma.
InfoCannabis – Cual ha sido su respuesta?
InfoCannabis – Hay ya unos plazos para iniciar el cultivo?
Marcelo Morante: Los plazos creo que comenzarán a correr desde la autorización del ejecutivo para un cultivo que resuelva la fuente de la sustancia para los ensayos clínicos.
InfoCannabis – Cual es el siguiente paso?
Marcelo Morante: El siguiente paso, es seguir trabajando en educación médica comunitaria y lograr rápidamente las modificaciones de la ley de drogas que haga que el modelo Gral La Madrid se replique en muchos municipios.
InfoCannabis – Quieren añadir algo más?
Marcelo Morante: Espero que se pueda generar la evidencia que las sociedades científicas exigen y se ponga fin a esta discusión sobre seguridad y eficacia, ya sin moralidad ni preconceptos de los cuales todos fuimos víctimas.
(1) Marcelo Morante. Médico Rural nacido en General La Madrid.
Especialista Universitario Jerarquizado en Medicina Interna, Profesor Adjunto Interino de La Cátedra de Medicina Interna (UNLP).
Coordinador del Servicio Universitario de Medicina Interna con sede en el Instituto Médico Platense. El Dr. Morante es el responsable de estudiar los efectos terapéuticos de los cannabinoides en la Universidad de La Plata y uno de los máximos referentes e impulsores del proyecto Cannabis Medicinal en Argentina.
Fotos: Prensa Municipalidad de General La Madrid
Entrevista y textos: Diego Bertone. Todos los derechos reservados.
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