Las criptomonedas, y sus múltiples aplicaciones, han llegado para quedarse. La descentralización de su gestión y la posibilidad de generar contratos inteligentes permiten una mayor transparencia, trazabilidad y fiabilidad en nuestros intercambios de bienes y servicios, evitando corrupciones, egos y jerarquías. Si a ello le añadimos los problemas a los[…]